El deterioro cognitivo, en particular el deterioro cognitivo vascular, es una grave preocupación que afecta a personas con factores de riesgo cerebrovascular como hipertensión, diabetes e hiperlipidemia. Se manifiesta como un espectro de deterioro cognitivo, que abarca desde el deterioro cognitivo leve hasta la demencia, atribuible en gran medida a enfermedades cerebrovasculares, incluyendo tanto afecciones evidentes como el ictus como otras sutiles como las lesiones de la sustancia blanca y la isquemia cerebral crónica. Para controlar eficazmente esta dolencia, la intervención y el tratamiento tempranos son cruciales.

Comprensión del deterioro cognitivo vascular
El deterioro cognitivo vascular se puede clasificar en dos tipos principales:
1. Deterioro cognitivo vascular no relacionado con demencia
Los pacientes suelen presentar factores de riesgo de enfermedad cerebrovascular y presentar déficits cognitivos leves que no cumplen los criterios de demencia. El deterioro cognitivo puede manifestarse de forma repentina o gradual, a menudo manifestándose como una disminución de la memoria, el pensamiento abstracto y el juicio, acompañada de cambios de personalidad. Sin embargo, las capacidades de la vida diaria generalmente se mantienen intactas.
2. Demencia vascular
Este tipo de demencia, que se presenta principalmente después de los 60 años, suele estar precedido por antecedentes de accidente cerebrovascular y se caracteriza por un deterioro progresivo de la función cognitiva que cumple los criterios de demencia. Los pacientes pueden experimentar deterioro significativo de las funciones ejecutivas, como el establecimiento de objetivos, la planificación y la resolución de problemas, junto con una reducción notable de la memoria a corto plazo y la capacidad de cálculo. Los síntomas neurológicos acompañantes pueden incluir apatía, disminución de la comunicación verbal, ansiedad y alteraciones del estado de ánimo.
Enfoques generales de tratamiento
El pronóstico del deterioro cognitivo vascular mejora significativamente con un diagnóstico temprano. Las estrategias de tratamiento incluyen lo siguiente:
1. Tratamiento etiológico
Abordar y tratar la enfermedad cerebrovascular y sus factores de riesgo es fundamental para el manejo del deterioro cognitivo vascular. Esto incluye la terapia antiplaquetaria, los tratamientos hipolipemiantes y el manejo de la hipertensión y la diabetes.
2. Manejo de síntomas cognitivos
Los inhibidores de la colinesterasa, como el donepezilo, y los antagonistas del receptor NMDA, como la memantina, pueden mejorar la función cognitiva en pacientes con demencia vascular. Sin embargo, su eficacia en el deterioro cognitivo vascular no asociado a demencia sigue siendo incierta. Los tratamientos complementarios pueden incluir vitamina E, vitamina C, extractos de ginkgo biloba, piracetam y nicergolina.
3. Tratamiento sintomático
Para los pacientes con síntomas depresivos, los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) pueden ser beneficiosos. Se pueden recetar antipsicóticos, como la olanzapina y la risperidona, para el tratamiento a corto plazo de alucinaciones, delirios y trastornos agudos del comportamiento.
El papel de la terapia de oxígeno hiperbárico
La terapia de oxígeno hiperbárico (OHB) está ganando atención como una nueva intervención para mejorar la función cerebral en personas con deterioro cognitivo.Sus mecanismos terapéuticos incluyen:
1. Aumento de los niveles de oxígeno
La HBO aumenta el contenido de oxígeno y la presión parcial, mejorando la difusión de oxígeno y mejorando el suministro de sangre a los tejidos cerebrales afectados, lo que potencialmente beneficia la memoria y el estado mental.
2. Propiedades mejoradas de los glóbulos rojos
Reduce el hematocrito y aumenta la flexibilidad de los glóbulos rojos, disminuyendo así la viscosidad sanguínea.
3. Restauración de áreas isquémicas
La HBO promueve la recuperación de la penumbra isquémica,facilitando la neurorrecuperación y regeneración.
4. Reducción de la lesión por reperfusión
Al mitigar el estrés oxidativo y disminuir la producción de mediadores inflamatorios, HBO ayuda a proteger el tejido neuronal del daño.
5. Dinámica neurovascular mejorada
HBOoptimiza la hemodinámica cerebral, aumenta el BDNF endógeno y mejora la función cognitiva.
6. Mejora de la permeabilidad de la barrera hematoencefálica
Mejora la permeabilidad de la barrera hematoencefálica, aumentando la eficacia del fármaco y la tasa de absorción.

Conclusión
El deterioro cognitivo vascular plantea desafíos importantes, pero el diagnóstico y la intervención tempranos pueden conducir a resultados más favorables. La terapia de oxígeno hiperbárico ofrece una vía prometedora para mejorar la función cognitiva y proteger el cerebro de un mayor deterioro.
Hora de publicación: 02-dic-2024